estructuras coloniales de poder
“To heal you have to get to root of the wound and kiss it all the way up” rupi kaur
“What a pain to be trapped in this colonial order.” Grada Kilomba, Plantation Memories.
Vivimos en un sistema de orden post-colonial basado en estructuras racistas, sexistas, clasistas y homófobas que discriminan y marginalizan sistemática, estructural e institucionalmente a grupos de personas racializadas, empobrecidas, a personas no heteronormativas, a personas con discapacidad. Estas estructuras de las que participamos, en muchos casos de manera inconsciente, permean en experiencias cotidianas que enferman y traumatizan a los grupos vulnerabilizados precisamente a partir de esta matriz colonial de poder.
Analizar y reconocer qué posición tengo en el marco de estas estructuras, me lleva inevitablemente a hacerme cargo de mis privilegios y también de las opresiones que sufro a partir de mis identidades, de las categorías a las que pertenezco. El color de piel, nuestra identidad de género y orientación sexual, origen, clase social, religión, estado de salud, son identidades que atraviesan nuestra biografía y conforman la realidad que vivimos. Ningún espacio es neutral, todos los espacios están atravesados por lógicas de poder colonial-capitalista-patriarcal. Y esas estructuras de poder producen daños en nuestros cuerpos, en nuestras vidas.
Mujeres* BIPoC, mujeres* migrantizadas, mujeres* con historia migratoria y de refugio están confrontadas con estas estructuras de poder en su cotidiano. Nuestras experiencias de exclusión y opresión se registran en nuestros cuerpos y memoria. Experiencias traumáticas que a menudo son silenciadas y no reconocidas por el entorno ni por la sociedad.
Nos preguntamos cómo podemos sanar y reparar estos dolores y traumas en nuestras biografías cuando no se produce un reconocimiento y proceso de reparación en el entorno y/o sociedad donde vivimos. Consideramos que el hecho de darle espacio a estas experiencias y episodios en un espacio colectivo feminista inicia el camino hacia la sanación. Ser consciente de las estructuras opresoras de las que formamos parte es uno de los pasos del proceso de reparación, curación. La transformación de estas experiencias en lenguajes artísticos nos permite nombrar y visibilizar a través de una puesta en escena las experiencias, recuerdos, vivencias y pensamientos dolorosos y/o traumáticos. El compartir estos procesos en grupo nos permite ser parte de una colectiva que nos sirve de plataforma para darle voz, alcance y escenario a nuestros dolores, miedos y traumas, y convertirlos así en algo vivido, colectivo, reconocido, denunciable y con posibilidad de cambio.
Sanar desde dentro hacia fuera.
Trauma
“El miedo hace que una pierda el contacto con una misma”, Karina Villavicencio.
¿Qué entendemos por trauma? El término trauma deriva de la palabra griega τραῦμα y significa herida. Los episodios cotidianos de racismos y discriminaciones son experiencias violentas que se transforman en traumáticas si no son nombradas, reconocidas y tratadas adecuadamente. Necesitamos espacios colectivos, espacios políticos, espacios feministas que reconozcan estas formas de violencia y dolor.
En la concepción de nuestro proyecto “Berlin decolonial: Procesos de Sanación a través de lenguajes artísticos” (Dekoloniales Berlin: Heilungsprozesse durch künstlerische Sprachen) lanzamos las siguientes cuestiones: ¿Dónde están registradas nuestras experiencias traumáticas y dolorosas? ¿En qué espacios colectivos se pueden dar estos procesos de sanación? ¿Con qué herramientas colectivas podemos sanar? ¿Qué papel juegan el reconocimiento y la escucha de la otra en los procesos de sanción? ¿Cómo transformar estos dolores en lenguajes artísticos que den cuenta de nuestras experiencias más traumáticas?
Con este proyecto queremos explorar y crear un espacio político de reflexión en donde abordar los episodios traumáticos inscritos en el cuerpo. Queremos sanar heridas. Viejas heridas. Heridas heredadas. Heridas colectivas. Heridas generacionales.
Sanación y lenguajes artísticos
“Mit dem Wort Heilung sind ein gewisses Stigma und eine Scham verbunden, weil es mit einer Opferrolle und Schwächen in Verbindung gebracht wird. Wir wollen ungerne akzeptieren, dass einige von uns und die Generationen vor uns verwundet worden sind. Aber mit dem Trauma kommen Resilienz und Kraft. Wir sind keine Opfer, Kinder Überlebende.” Emilia Roig, Why we matter. Das Ende der Unterdrückung.
Nombrar nuestras experiencias traumáticas y dolor, lejos de situarnos como víctimas, nos posiciona como sujetas de acción que se hacen cargo de su historia y quieren producir alguna transformación y cambio al respecto. Procesos de empoderamiento, participación y representación se ven apoyados por el trabajo colectivo de toma de conciencia, de sanación y reparación. En el marco de este proyecto, se da además la corporeización de estos dolores en prácticas artísticas. Como afirma la maestra bell hooks “True resistance begins with people confronting pain… and wanting to do something to change it”.
Nos preguntamos ¿qué significa sanar en un contexto político feminista? En una espacio colectivo lanzamos las siguientes preguntas a las participantes* a los talleres de este proyecto:
1- Describe un episodio doloroso o una experiencia en la que te hayas sentido discriminado/a.
2- ¿Puedes localizar tu dolor o tu experiencia en alguna parte de tu cuerpo? Si es así, ¿dónde sería?
3- ¿Tiene tu dolor una forma o un color?
4- Por favor, dibuja ese dolor.
5- ¿Puedes identificar lo que necesitabas en ese momento para no sentir ese dolor? Escribe una frase o tres palabras que describan tus necesidades.
6- En este contexto ¿Qué significa „sanación“ o „reparación" para ti?
“Relax. Breath in and out. It is important to have time when you are just relaxing. You are in the present moment. The present moment seems like a little dot. But that dot carries the human history of past, present and future and all the people and things you love". Yoko Ono.
Este proyecto está financiado por los Aktionsfonds Friedrichshain 2023.